Vamos a suponer por un momento que el desarrollo intelectual es algo que beneficia a nuestra especie.
No lo planteo como una certeza porque realmente no la tengo.
Sólo sé que a mí me parece bueno hacerlo, pero reconozco que es un gusto personal
compartido por muchos, pero no necesariamente debe ser el objetivo de todos.
El desarrollo intelectual incluye el acceso al pensamiento
abstracto (entender ideas como libertad, amor, belleza) y contar con la función
simbólica (sobre todo en el uso experto de por lo menos un idioma).
Como una consecuencia de ese desarrollo, el individuo puede
hacer uso de la sublimación que consiste en que ciertos deseos pueden
satisfacerse indirectamente.
El ejemplo más notorio refiere a la prohibición del incesto:
quien puede sublimar se sentirá satisfecho formando una familia con una persona
ajena a la familia.
No todos los que respetan la prohibición del incesto lo
hacen porque subliman. Muchos lo hacen por temor a la sanción legal y social.
Otro beneficio de sublimar es canalizar la sexualidad
reproductiva sin necesidad de tener muchos hijos. Por ejemplo generando riqueza
para ayudar a los niños en situación de pobreza, o con un emprendimiento que le
dé trabajo a otros (como si sus empleados fueran hijos), o a realizar obras de
arte, máquinas, soluciones de diferente orden (político, social, técnico).
En suma: con el desarrollo intelectual que permite sublimar
es posible satisfacer el deseo sexual re-productivo mediante una actividad productiva.
Por el contrario, quien no puede sublimar
necesita tener muchos hijos que quizá no pueda mantener.
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